Años de estudios científicos han sido invalidados por el reciente descubrimiento del Profesor Vincent Von Venture, investigador de la mundialmente prestigiosa Universidad de Alcañiz.
Un pequeño accidente en el laboratorio que el Prof. Von Venture define como "Un hilarante desliz sobre el pavimento propiciado por la incorrecta ubicación de los restos orgánicos de un ejemplar de musa acuminata (plátano de canarias, el de las motitas)" ha sido el detonante del hallazgo.
Tras reorganizar todo tras el caos del momento, en que se han perdido unos 4.000 euros en material de laboratorio y la última muestra de ADN de Copito de Nieve, el gorila albino, Von Venture se ha percatado de que el microscopio tenía las lentes al revés, dándose cuenta de que en lugar de aumentar la visión, los microscopios siempre la han reducido. Esto implicaría que el tamaño mínimo de un microorganismo serían aproximadamente dos metros de diámetro.
La comunidad científica se halla trastornada, ya que los cimientos de la medicina actual tiemblan, cosa que sugiere que la mayoría de avances modernos no tienen ninguna base y funcionan por pura casualidad. A su vez, se plantean nuevas preguntas para la ciencia como el por qué no vemos a simple vista unos seres tan enormes, y sobretodo, cómo puede ser que nadie se diera cuenta de que todos los microscopios del mundo estuvieran al revés.
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